¿Que és?Es una pastilla principalmente compuesta de modafinil, la cuál es usada para dejar de dormir por un tiempo determinado.
¿Quién las consume?Principalmente las consumen los universitarios de carreras que exigen mucho y también se ha descubierto que la consumen algunos empresarios
¿Dónde se pueden conseguir? Usualmente se consiguen en lo que es llamado "mercado nego", pero también con receta médica se pueden conseguir (aunque es muy dificil) en la farmacia
¿Cuánto cuestan?Dos pastillas en el "mercado negro" te cuestan de 15.000 pesos para arriba.
En una farmacia no es mucho más barato pero de que es mas barato lo es.
¿Cómo se consumen?Tome cada dosis con un vaso de agua lleno.
Modafinil puede tomarse con o sin una comida, por lo general una vez al día.
Es muy importante tomar modafinil con regularidad para obtener el mayor beneficio.
Modafinil no es un sustituto para dormir. Modafinil puede reducir los riesgos de somnolencia, pero tal vez no pueda tratar este problema por completo. Algo de somnolencia tal vez persista. Guarde el modafinil a temperatura ambiente, lejos de la humedad y el calor
¿Qué sucede si ocurre una sobredosis?Busque atención médica de emergencia si sospecha una sobredosis
Los síntomas de una sobredosis de modafinil pueden incluir excitación, agitación, insomnio, problemas al dormir, ansiedad, mal genio, agresividad, confusión, nerviosismo, temblor, palpitaciones, náusea y diarrea.
¿Cuáles son los posibles efectos secundarios del modafinil?Si siente cualquiera de los siguientes efectos secundarios, poco comunes, pero de gravedad, deje de tomar modafinil y busque atención médica de emergencia o comuniquese con su médico de inmediato:
reacción alérgica (dificultad al respirar, cierre de la garganta; hinchazón de los labios, la lengua o la cara; o ronchas);
latidos del corazón irregulares;
presión arterial baja o elevada; o
falta de aire al respirar.
Es más probable que otros efectos secundarios de menor gravedad puedan ocurrir. Siga tomando modafinil y hable con su médico si siente
dolor de cabeza;
infección;
náusea, pérdida del apetito o diarrea;
escalofríos;
sequedad en la boca;
nariz goteante;
dolor de garganta;
nerviosismo;
ansiedad;
mareo;
insomnio;
depresión; o
entumecimiento u hormigueo.